Consejos decorativos para el otoño

Cuando la naturaleza saca su gran paleta de colores a relucir, es cuando los días se acortan y se vuelven más oscuros. Pero antes de que los colores del otoño desaparezcan y, en muchos casos, se vean teñidos del blanco de la nieve, se pueden utilizar las bonitas hojas caídas de los árboles como elementos decorativos en nuestro hogar.

Si quieres utilizar hojas caducas como decoración para traer un poco naturaleza dentro de tu hogar, primero deberás secar las hojas. Para ello existen dos métodos: en el primero, las hojas que queramos secar se colocan entre dos hojas de papel de horno y luego se coloca una pila de libros encima. Cambia el papel diariamente y tras un par de días, ya tendrás hojas secas. Con el segundo método, necesitarás un bote de cristal con tapa y sal. Introduce una capa de sal dentro del bote y posteriormente, introduce las hojas de una en una. Coloca otra capa de sal sobre ellas y así sucesivamente hasta introducir todas las hojas. Mantén el bote cerrado durante una semana y ya estarán listas tus hojas secas.

Las hojas secas se pueden utilizar para crear estupendos centros de mesa. No hay límites, tan lejos como llegue tu creatividad. No obstante, te ofrecemos algún consejo por si no se te ocurren muchas ideas. Las coloridas hojas de los árboles crean un bonito contraste con la oscuridad de los días otoñales. Puedes comprar o hacer tú mismo un centro de mesa y decorarlo con tus hojas secas. Así conseguirás un elemento decorativo muy, muy sencillo y que quedará precioso en tu hogar.

Los elementos decorativos en color dorado, rojo o marrón quedan muy bien con las hojas otoñales, incluso con más elementos naturales como madera, calabazas, etc. No te olvides de combinar las hojas con algunas flores frescas, como por ejemplo girasoles o dahlias.