Purismo: las claves de este estilo

El purismo como tendencia en la moda del hogar no es algo nuevo. Sin embargo, recientemente ha experimentado un nuevo auge. Echemos un vistazo a lo que hay detrás de este estilo decorativo milenario.

El purismo se caracteriza por la sutileza y la finura. No es simplemente un estilo decorativo, sino que incluso podría ser descrito como una especie de filosofía. La atención se centra en el principio de "menos es más". Esto se manifiesta en las decisiones de diseño simple. Aquí importan la simplicidad, la elegancia y la atemporalidad. Lo que tal vez suene aburrido y monótono, es todo lo contrario, si se hace correctamente.

El purismo fue inventado hace 2.000 años en la antigua Roma. La funcionalidad era el lema de entonces. Cada pieza de mobiliario debía ser lo más útil posible, no había ni una sola cosa que no tuviera utilidad. De este modo, en las casas romanas no había muchos muebles, pero los que había eran de una calidad excepcional.

¿Qué es lo que tenemos que tener en cuenta para conseguir un estilo purista?

  • Las formas: el purismo valora la rectitud. Esto se contrasta con detalles curvos y redondos. Las líneas continuas son fundamentales, ya que marcan la diferencia entre una habitación impresionante y una habitación que resulta fría y poco acogedora. La composición de cada elemento juega un papel primordial.

  • El material: los materiales naturales de alta calidad son la mejor opción, ya que transmiten el mensaje del purismo. Se debe prestar especial atención a dos cosas: la estructura del material debe ser simple y la calidad o el procesamiento altos.

  • El color: la mayoría de las habitaciones están dominadas por un color que actúa discretamente en segundo plano. Pueden introducirse accesorios que resalten y que capten la atención del observador. No obstante, también es posible utilizar combinaciones de colores (por ejemplo, blanco/gris/negro) para conseguir un determinado efecto óptico.

  • La decoración: aquí es donde hay dos vertientes. Hay quien considera que el purismo de verdad no admite decoración alguna. Por otra parte, hay otros que dicen que hay que introducir pocos y selectos elementos decorativos. La mayoría se decantan sobre todo por plantas o arte moderno.

Si se tienen en cuenta estos puntos, se puede conseguir un gran resultado tan sólo con unos pocos elementos. El objetivo claro es conseguir una atmósfera clara, que rezume tranquilidad y lograr el equilibrio perfecto entre una decoración discreta y elementos decorativos que capten nuestra atención.

Con el estilo purista se puede conseguir un espacio que nos equilibre y nos ayude a reducir el estrés en nuestra vida cotidiana. Esta es una de las razones por las que el purismo está de moda otra vez.